La decisión está casi tomada. Un grupo de radicales abandonará la bancada que conduce Rodrigo De Loredo y conformará otro bloque aparte. Lo único que puede torcer ese rumbo es que antes queden afuera los cinco diputados que se aliaron con el oficialismo para blindar el veto a la ley de movilidad jubilatoria, primero, y después el del financiamiento universitario. Todo dependerá de lo que suceda en la reunión prevista para este martes en la Cámara baja. La amenaza no es nueva. La semana pasada, el sector que lidera Facundo Manes y el que se referencia en Martín Lousteau le dejaron en claro a sus correligionarios que no están dispuestos a continuar compartiendo el mismo espacio con Mariano Campero, Luis Picat, Martín Arjol, Federico Tournier y Pablo Cervi. "No lo hicieron una vez, sino dos. Dos veces arreglaron con Milei y votaron con la Libertad Avanza, encima en temas que son claves para el radicalismo", señaló uno de los legisladores que está a punto de dar el portazo.Los cinco díscolos, que semanas atrás se fotografiaron con el mandatario en la Casa Rosada, en lo que fue la antesala de la votación de la ley de movilidad jubilatoria, volvieron a votar junto a la bancada oficialista para rechazar la ley de financiamiento universitario, a pesar de las advertencias de De Loredo para que todo el bloque radical vote en el mismo sentido. Como si fuera poco, ambas normas habían sido presentadas por la UCR. A los diputados que cuestionan la permanencia de los legisladores "peluca" no le alcanzan los votos para echarlos. La última esperanza que tienen es sumar a quienes no se sienten parte de ningún bando, pero hasta ahora no fue posible. Incluso, Julio Cobos -que no responde a ningún sector en particular- pidió darles una oportunidad más a Campero, Picat, Arjol, Tournier y Cervi.Ante la indecisión de De Loredo, que busca que no se le desmorone el bloque, los diputados que siguen a Manes (Fernando Carbajal, Pablo Juliano, Marcela Coli, Manuel Aguirre y Jorge Rizzotti) están decididos a irse ellos para formar otra bancada radical. Lo harían junto a los legisladores que lidera Lousteau (Mariela Coletta, Danya Tavela, Carla Carrizo y Marcela Antola).A ese grupo podrían sumarse Melina Giorgi, Juan Carlos Polini y Natalia Sarapura. Con ellos, el nuevo bloque sería de 13 integrantes. Del otro lado quedarían 20, pero cinco de ellos estarán con la mirada puesta en La Libertad Avanza. Aún así, todavía no está claro qué harán Cobos, Fabio Quetglas, Atlio Beneditti y Mario Barletta, que también están a disgusto con el funcionamiento que tiene el radicalismo en la Cámara baja. Por el momento, ninguno de ellos están pensando en irse.El sello de la UCR quedaría para De Loredo, aunque la conducción del partido a nivel nacional se sienta identificado con la postura de quienes tienen resuelto hacer otro armado. Por el reglamento de Diputados, el bloque de la Unión Cívica Radical ya está registrado para este período parlamentario.Todo eso estará presente en la reunión que se realice este martes, sin embargo son pocos los que creen que se resolverá algo sobre la dinámica del bloque. "Hay demasiados grupos, que se desconfían entre sí y que cada vez tienen menos cosas que los unan", apuntó un diputado radical.